Los rumores de los planes de la Unión Europea para desarrollar un pasaporte de vacunas transnacional son ahora una realidad definitiva.
Los funcionarios de la UE confirmaron que están trabajando en un “pase verde digital” europeo y se espera que la Comisión Europea publique un borrador de la legislación antes del 17 de marzo, según Euronews.
Si bien siguen siendo controvertidos, los pasaportes de las vacunas permitirían a quienes se hayan vacunado por completo moverse más libremente entre los países dentro del bloque, con suerte, revitalizando el sector de viajes severamente deprimido en el proceso. El esquema permitiría a los viajeros completamente vacunados eludir las restricciones actuales de los estados miembros, como la cuarentena de 10 días y las medidas de prueba obligatorias.
Los pasaportes de vacunas potencialmente se vincularían no sólo a los certificados de vacunación oficiales, sino a los resultados recientes de las pruebas de COVID-19 o evidencia documentada de una recuperación previa de COVID-19. El próximo borrador de propuesta de la Comisión Europea establecerá los detalles de un formato común que pueda ser aceptado en toda la UE y sentará las bases para la futura interoperabilidad de la tecnología.
El cronograma para el lanzamiento real de este pasaporte de vacuna digital debería ser más claro una vez que se haya publicado la propuesta oficial, pero varios países esperan que llegue a tiempo para facilitar los viajes de verano, lo que puede ser un importante contribuyente a sus respectivas economías. Time Out informó que estos “pasaportes” probablemente no estarán disponibles hasta junio, como muy pronto.
El mes pasado, la canciller alemana, Angela Merkel, respondió a las preocupaciones de que los pasaportes de vacunas llevarían a prácticas discriminatorias contra los no vacunados: “Ciertamente será bueno tener un certificado de este tipo, pero eso no significa que sólo aquellos que tienen un pasaporte de este tipo podrán viajar”.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo ayer: “El (pase) debería facilitar la vida de los europeos. El objetivo es permitirles gradualmente moverse con seguridad en la Unión Europea o en el extranjero, por trabajo o turismo”. También ha revelado que cree que alrededor del 70 por ciento de todos los ciudadanos adultos de la UE habrán sido vacunados al final del verano, y lo calificó como un “objetivo con el que confiamos”.
Reconociendo que pueden surgir preocupaciones entre los distintos estados miembros, von der Leyen explicó: “La decisión sobre lo que puede hacer potencialmente con un certificado de vacunación de este tipo debe decidirse particularmente dentro de cada país. Pero, a nivel de la UE, creo que deberíamos utilizarlos para garantizar el funcionamiento del mercado único”.
La Comisión Europea también dijo ayer que colaboraría con la Organización Mundial de la Salud para, eventualmente, extender el sistema a países no pertenecientes a la UE. Un portavoz del primer ministro británico, Boris Johnson, dijo que el Reino Unido también discutirá su participación en el programa de pasaportes de vacunas de la UE.